¿Alguna vez te has percatado de como la gente cambia durante tu evento? ¿Has visto como caras llenas de expectativas en la mañana dieron paso a expresiones de irritación e indiferencia? Aunque hiciste tu mejor esfuerzo para ejecutar un evento impecable, parece que las cosas no funcionaron.
“No se puede luchar contra el cansancio. Es normal para los asistentes fatigarse, sobretodo cuando han tenido un día intenso”, es una de las justificaciones que podrías dar para ignorar la situación.
Pero luego te das cuenta al mirar tu reloj que el evento ha iniciado hace dos horas.
¿Quieres proveer una mejor experiencia para tus asistentes? Echemos una mirada a quiénes son tus clientes.
Aparte del cansancio, tus asistentes parecen indiferentes a lo que sucede en el evento y se distraen fácilmente (navegando en redes sociales o pasando el rato jugando Pokémon).
¡Malas noticias: has matado de aburrimiento a tus pobres asistentes!
Tal como los investigadores Colleen Merrifield y James Danckert señalaron en su estudio “Caracterización de la marca psicosocial del aburrimiento”:
“El aburrimiento, relativo a la tristeza, puede ser describirlo como un estado afectivo negativo asociado con una mayor excitación”.
Los expertos muestran que en el momento del aburrimiento, el nivel de estrés hormonal se incrementa y las personas experimentan una serie de sensaciones incómodas.
Al aburrirse, las personas se sienten desconectadas de su entorno. Incluso manifiestan su deseo de “involucrarse en actividades más significativas sin ser capaces de hacerlo”.
En otras palabras, el aburrimiento hace a la gente infeliz y tus asistentes no son la excepción.
Un evento tedioso puede tener un impacto negativo en el público. Éste estará desconectado, disperso, cansado y somnoliento. No será capaz de concentrarse y sentirá que está perdiendo su tiempo.
¿Es tu deseo planear eventos que induzcan estos efectos negativos? Seguramente no. Para hacer felices a tus clientes, debes ponerte serio en la lucha contra el tedio en tus eventos.
Aquí hay algunas soluciones que podrían ayudarte.
Solución #1. Diseña cuidadosamente el programa del evento
Mira tu programa.
¿Está saturado de actividades?, ¿Qué tipo de actividades?, ¿Qué tan denso será el día de tus participantes?
Mantén entretenido a tu público diseñando un programa balanceado y al mismo tiempo interesante. Busca diferentes dinámicas para tener a tu público involucrado.
Por ejemplo, después de una presentación, ve por una sesión de PechaKucha. Luego, invita a tus invitados a una mesa redonda y a una sesión exhaustiva de preguntas y respuestas. Después les ofreces un taller creativo. De esta manera diversificas la experiencia y evitas que se aburran con una dinámica única, repetitiva y dinámica.
Ten cuidado igualmente con la intensidad de los eventos. No atiborres tu agenda con actividades densas o pesadas que cubren hasta el último minuto. Dale a tu público el tiempo de hacer pausas para tomar café e interactuar entre ellos.
Solución #2. Pide a tus oradores presentaciones que capturen la atención
¿Hay algo peor que un orador aburrido que excede su tiempo de presentación?
Esta experiencia puede tornarse insoportable.
Evita estos momento hablando con los oradores y explicándoles las reglas del evento. Especifica cuanto tiempo tienen para desarrollar su presentación. Ayúdales con recomendaciones para realizar una buena exposición. Y no olvides pedirles apasionar a tu público cuando estén hablando.
Solución #3. Anima a los participantes a recuperar sus energías
Además de pausas para tomar café, tus participantes posiblemente necesiten otros espacios para restaurar su atención. Para lograrlo, prepara algunas actividades que les repongan.
Une de los ejemplos de esta práctica es el reconocido emprendedor, Tony Robbins, quien anima a sus espectadores a saltar, bailar o ejercitarse durante sus sesiones increíblemente largas.
Esto permite a los asistentes recuperarse y mantenerse en buena actitud.
¡Haz un llamado a la atención!
¿Es tu evento lo suficientemente cautivador?
¿Estás seguro de hacer todo lo que puedes para hacer feliz a tu público y evitarles el tedio durante tus eventos?
Revisa el programa de tu evento. Evita poner demasiadas cosas. Alterna con diferentes tipos de dinámicas. Pide a los oradores dar buenas charlas y mantener al público interesado. Por último, puedes recurrir a actividades que potencien la energía de tus participantes.
