¿Qué es retorno sobre la emoción? ¿Por qué es tan crucial entenderlo y evaluarlo? ¿Es más valioso que el ROI de un evento? En este artículo, averiguaremos las respuestas a estas y otras preguntas.
Cuando hablamos de eventos, siempre estamos obsesionados por los KPIs y el ROI. Pensamos que no hay ninguna otra forma de evaluar el éxito de nuestra conferencia, seminario, o feria de negocio. No hay nada más relevante y digno de confianza que números como:
- ¿Cuántos tiquetes vendimos?
- ¿Cuánta gente asistió al evento?
- ¿Cuántas reuniones B2B agendaron los asistentes?
- ¿Cuántos likes recibió nuestro evento en Facebook?
- ¿Cuánta gente vio el streaming del evento?
- ¿Cuánta gente vino a la cena de cóctel?
- ¿Cuánto dinero invertimos en el evento?
- ¿Cuál fue la utilidad?
Estas son solo unas pocas preguntas que intentamos contestar cuando decidimos los KPIs del evento. Sin embargo, no logramos entender que no podemos medir el éxito real de nuestro evento solo con números.
Es como alardear del tráfico que tiene tu website, aunque la gente llegue a tu página accidentalmente sin tomarse el tiempo de consumir tu contenido o decidir si es lo suficientemente interesante como para leerlo.
Lo que es importante al momento de evaluar el impacto de tu evento es la transformación emocional que tus invitados experimentaron luego de asistir a tu convención o feria.
En otras palabras, aparte de medir tus KPIs y ROI, también quieres evaluar el Retorno sobre la Emoción, (Return On Emotion).
El verdadero poder de las emociones en los eventos
¿Por qué realices el evento? ¿Es porque deseas atraer más leads, incrementar la visibilidad de marca, o convencer a la gente de que sean tus embajadores? No respondas; esa era una pregunta retórica.
La respuesta de todas formas no importa, porque sin importar cuáles sean tus metas, no puedes alcanzarlas si no eres capaz de cambiar la forma en que tus invitados se sienten durante el evento.
¿Por qué piensas que Tony Robbins puede cobrar miles de dólares por asistente en su “Desata el poder en los eventos”?
Aunque no todo el mundo esté muy feliz por los métodos de Robbins durante los seminarios de tres días, la mayor parte de los asistentes lo ama, y afirman que sus eventos han cambiado sus vidas. ¿Cómo es esto posible?
El truco que Tony Robbins y su equipo están usando es llegar emocionalmente a la gente. Danzan como locos, y hacen cosas tontas (tales como mirarse unos a otros mientras tocan sus narices y saltan).
Estas cosas combinadas producen un amplio rango de emociones que de alguna forma cambia la percepción que los asistentes tienen del evento. Terminan disfrutándolo, y en algunos raros casos, odiándolo.
Obvio, no te estoy diciendo que seas justo como Tony Robbins y bailes y cantes en tus eventos.
Sin embargo, esto muestra el verdadero poder de las emociones en transformar la manera en que la gente siente, piensa, o se comporta. Al enfatizar en este aspecto, podrás ganar la confianza y completa atención de tus asistentes.
Más aún, harás de tu evento verdaderamente memorable. Después de todo, ¿qué crees que la gente recordará: el conferencista aburrido que leía su discurso de los slides o la actividad sorpresa al aire libre que habías preparado para ellos?
¿Qué es el retorno en las emociones?
Simple: es el ratio entre el esfuerzo y los recursos que has puesto en diseñar el evento y el compromiso emocional y el engagement de tus asistentes.
Aquí cómo funciona: mientras más te enfoques e inviertas en ofrecer una experiencia atractiva y emocionalmente satisfactoria, mayores serán las posibilidades de que alcances tus metas.
Digamos, por ejemplo, que realizas un evento para hacer de tus invitados embajadores de tu marca. ¿Se sentirán motivados a serlo si tu evento es una aburrida reunión más, como cualquier otro evento que no llene sus expectativas
Lo más probable es que no darán una oportunidad a tu marca y se olvidarán por completo de tu evento (o lo describirán como una mala experiencia).
Pero qué tal si tomas sus necesidades en consideración y diseñas una conferencia que sea:
- Personalizable (la gente puede escoger a cuáles sesiones asistir)
- Interactivo (hay variedad de actividades grupales)
- Sorprendente (has preparado un emocionante programa social)
- Divertido (los moderadores y los oradores que invitaste son extremadamente inspiradores)
- Entretenido (has incorporado técnicas de storytelling)
- Energizante (a través de la música y actividades divertidas)
- Y todo eso, ¿empaquetado como una experiencia de alto nivel?
Entonces la gente estará emocionada de contarle a otros sobre tus eventos y compartir lo que vivieron, y así es como se vuelven embajadores de tu marca.
Midiendo el ROE
Si deseas volverte realmente buen en ingeniar emociones positivas para tus asistentes, deberías definitivamente comenzar midiendo el ROE. ¿Cómo puedes hacerlo? Primero, pregunta a la gente cómo se sintieron durante el evento.
Sí, simplemente ve a la multitud y habla a tus asistentes. Pregúntales cómo están y cuál es su impresión del evento. ¿Se están divirtiendo? ¿Cómo perciben a tu marca? ¿Considerarían asistir una segunda vez?
También puedes enviar encuestas online.
Concéntrate en el aspecto emocional de tu evento y deja a la gente escoger entre las emociones que has experimentado durante el evento. Para hacer las encuestas más perceptivas, pregunta a los participantes si recomendarían el evento o compartirían sus impresiones con un amigo.
Segundo, puedes revisar las acciones de tus participantes en redes sociales. ¿Hicieron comentarios sobre el evento, o postearon videos? ¿Lo mencionaron a sus amigos que no estaban presentes en el evento?
Esta información te permitirá ver de primera mano cómo se sintieron sobre tu evento.
Finalmente, nota que algunas compañías, tales como FC2events, fueron al punto de crear un sistema que, por medio de una video cámara, lee los músculos faciales de sus asistentes. Consecuentemente, como mencionaron en su website, “un software recoge la data, califica cada emoción percibida y la transforma en data emocional”.
Invierte en las emociones de tus asistentes
¿Qué define a los eventos de impacto? ¿Es la calidad de tus oradores? ¿O es el número de equipos audiovisuales que usaste? ¿Es tal vez la tasa de asistencia, o qué tan bonito es el sitio del evento?
Mientras todo esto importa cuando planeas un evento, no hay nada más importante que la forma en qué tus asistentes se sienten durante el evento. Así que comienza a invertir todo lo que tienes en las emociones de tus invitados.-
